El G20 reafirma sus compromisos con el sector salud

En la segunda reunión ministerial de Salud del G20, realizada en Argentina, se recordaron y reafirmaron los compromisos asumidos en la declaración de los ministros de Salud de Berlín en 2017.

En esta histórica reunión, los países que integran el G20 trataron temas relacionados con la salud, como los objetivos que se acordaron en el avance de la Agenda para el Desarrollo Sostenible de 2030, incluyendo como temas prioritarios el sobrepeso y la obesidad infantil.

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Dado que el sobrepeso y la obesidad infantil son relevantes también por sus consecuencias sociales y económicas, cada país del G20 ha desarrollado diferentes estrategias para frenar este problema.

Además, se dialogó sobre el fortalecimiento de los sistemas de salud para mejorar el acceso a la atención médica segura y de calidad hasta lograr la cobertura universal de la salud (CUS) con efectividad, equidad y calidad.

Según lo acordado, se establecerá un modelo centrado en las personas donde la atención primaria de salud será prioridad para los gobiernos, por lo que apostarán por una fuerza de trabajo capacitada y comprometida.

También el G20 contempla el uso de nuevas tecnologías para mejorar el acceso y la calidad de los servicios de atención de sanidad, al igual que establecer políticas que actúen en pro de una participación igualitaria en los puestos de toma de decisiones.

En lo que respecta a la resistencia antimicrobiana, se optó por fomentar la inversión en tecnología y el acceso a las nuevas tecnologías de diagnóstico, así como la promoción de medidas para concientizar a la población y a los trabajadores sanitarios sobre este problema.

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Los problemas relacionados con el sector salud en los distintos países representan graves riesgos para la salud mundial y para la economía y el desarrollo social, por lo que se requiere de un trabajo coordinado para atacar las problemáticas emergentes.

Asimismo, en todos los países que conforman el G20 se rescata un enfoque de género transversal. La igualdad de género y el empoderamiento de la mujer resultan un medio eficaz para reducir la pobreza y combatir otros problemas de nivel mundial a través de la inclusión, el respeto y la paz.