La inteligencia artificial es un área de tecnología en rápida evolución que promete ser un factor de cambio para diversas industrias y profesiones.
Un ejemplo de las actuales aplicaciones de la inteligencia artificial son los autos sin conductor, los sistemas de energía para el hogar y la administración de carteras de los inversionistas.
Por otra parte, temas como la contabilidad y la auditoría también se pretenden abarcar por la inteligencia artificial
Ventajas de la inteligencia artificial
Permite el análisis de una población completa de datos y puede identificar valores atípicos o excepciones.
El término «Inteligencia artificial» describe sistemas de cómputo que exhiben alguna forma de inteligencia humana.
Cubre una serie de tecnologías interconectadas que incluyen minería de datos, aprendizaje automático, reconocimiento de voz, reconocimiento de imágenes y análisis de sentimiento.
El aprendizaje automático se puede utilizar para codificar automáticamente las entradas contables.
Por ejemplo, al crear sofisticados modelos basados en el aprendizaje automático, los auditores también pueden mejorar la detección de fraudes.
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En los temas de auditoría se verá notable la transformación aún más mediante el aprendizaje profundo.
Una forma de inteligencia artificial que puede analizar datos no estructurados como correos electrónicos, publicaciones en redes sociales y archivos de audio de llamadas en conferencia.
Es decir, se puede aplicar a la auditoría está en la revisión del contrato.
Las herramientas de aprendizaje automático permiten a los seres humanos analizar un mayor número de contratos, como los arrendamientos, en un marco de tiempo mucho más breve de lo que es posible con una revisión manual tradicional.
En una prueba piloto reciente, las herramientas de inteligencia artificial pudieron extraer con precisión la información de los contratos de arrendamiento utilizando criterios preseleccionados en la gran mayoría de los casos: un nivel de precisión más alto del que el revisor humano promedio es capaz de ofrecer.
Al hacer posible que los auditores trabajen mejor y de manera más inteligente,
La inteligencia artificial los podrá ayudar a optimizar su tiempo, permitiéndoles usar su juicio humano para analizar un conjunto de datos y documentos más amplio y profundo.
De igual manera les permite formular mejores preguntas e interactuar más con los directores financieros, los comités de auditoría y las juntas directivas de las empresas, agregando valor al proceso de auditoría.
De esta forma, la inteligencia artificial podría contribuir a proporcionar auditorías de mejor calidad, y un futuro emocionante para los auditores.