Con el propósito de reducir su porcentaje de residuos plásticos, la empresa Lego, ha lanzado una selección de piezas con formas vegetales fabricadas con material bioplástico. Producido a partir del etanol de la caña de azúcar, este plástico flexible, suave y duradero se emplea para la fabricación de piezas con forma de plantas y árboles, y promete convertirse rápidamente en la materia prima de la empresa, para que todas estén hechas de este material para 2030.
La iniciativa se remonta a 2013, cuando la empresa se asoció con la ONG World Wildlife Fund (WWF) para apoyar y promover la demanda de plástico de origen sostenible. En 2016, el grupo se unió a la Bioplastic Feedstock Alliance (BFA) con el propósito de asegurar el origen completamente sostenible de la materia prima empleada en la industria del bioplástico. Hoy, el nuevo plástico de origen vegetal está certificado por el estándar de calidad de Bonsucro, una organización internacional sin ánimo de lucro que promueve el empleo de caña de azúcar de origen sostenible y procesamiento responsable.
Otros gigantes corporativos,como Coca-Cola, Evian, Marks & Spencer, L’Oreal, Walmart y Unilever, entre otros, se han comprometido también con la reducción de plástico en sus envases. Las empresas, anunciadas en el Foro Económico Mundial de este año en Davos, serán apoyadas por la Fundación Ellen MacArthur, que se esfuerza por acelerar la transición de los sistemas de producción hacia estándar de la economía circular.
¿Qué es World Wildlife Fund?
El World Wildlife Fund (WWF), la organización de conservación líder mundial, trabaja en 100 países y cuenta con el respaldo de más de un millón de miembros en los Estados Unidos y cerca de cinco millones en todo el mundo. La forma de trabajo única de WWF combina el alcance global con una base en la ciencia, involucra acciones en todos los niveles, desde locales hasta globales, y garantiza la entrega de soluciones innovadoras que satisfagan las necesidades de las personas y la naturaleza.
WWF-US es parte de la red mundial de WWF, que ha trabajado durante más de 50 años para proteger el futuro de la naturaleza. En 2016, WWF adoptó una nueva y audaz estrategia y transformación diseñada para fortalecer a la organización y hacerla aún más efectiva para enfrentar los desafíos futuros.