El impacto negativo de las tecnologías digitales en el medio ambiente todavía es poco conocido por los ciudadanos que, por la mayoría, nunca han escuchado de contaminación digital. Sin embargo, según un estudio de la empresa Occurrence, en 2018 el 16% del consumo de electricidad en el mundo era generado por estas tecnologías. «Cuando interactuamos en una red social o compramos espacio de almacenamiento en la nube, no nos dicen lo que realmente le cuesta al planeta«, dice el estudio, que afirma que los políticos y las empresas deben accionar la ecología digital.
La contaminación digital es mayor a la contaminación generada por el transporte aereo
La tecnología es omnipresente en la resolución de los problemas contemporáneos. De hecho, es la manera más eficiente de escalar una solución, ya que las tecnologías digitales son las únicas herramientas que permiten alcanzar a millones de personas de manera simultánea. Por eso en Colaborativo elegimos este lema: los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU son nuestro destino, y la tecnología es el camino que elegimos para lograrlo. Somos de los que creen que las transiciones digitales y ecológicas no pueden existir separadas, y que tienen que ir de la mano para lograr sus objetivos.
No obstante, ya que sabemos que la tecnología digital actualmente produce más CO2 que el transporte aéreo, puede ser cuestionable abogar por soluciones tecnológicas cuando se habla de transición ecológica. Como siempre, nos enfrentamos a un tema de responsabilidad.
Entre los materiales con extracción contaminante y la obsolescencia programada, la fabricación de nuestros dispositivos digitales pesa mucho. De hecho, cuando sabemos que se necesitan unas 16 veces el peso de un ordenador en materiales para fabricarlo, que con sólo pulsar el botón «Buscar» de Google, emitimos el equivalente de 5 a 7 gramos de CO², que enviando un simple correo electrónico se emiten 10 gramos (el equivalente de lo que un árbol puede absorber en un día), y que 60 millones de toneladas de cámaras digitales se tiran cada año por sólo un 5% de reciclado, estamos empezando a entender que hay un problema.
High Tech versus Green Tech
La ecología digital es, por lo tanto, «la disciplina que estudia el impacto ambiental de los diferentes ecosistemas que vinculan a los seres humanos con la tecnología digital a fin de limitar sus efectos nocivos sobre el medio ambiente«. La idea no es abandonar a la tecnología, ya que la necesitamos, sino de usarla de manera responsable y optimizada. ¿Cómo?
Del lado de los desarrolladores, es esencial que las tecnologías que crean estén optimizadas desde su concepción para consumir menos datos y energía. Diseñar aplicaciones de manera eficiente permite de hecho agilizar la experiencia de usuarios, bajar los costos y también consumir menos batería y datos. Empresas tales como Greenspector existen para medir el impacto ambiental de las tecnologías y ayudar los proveedores a optimizarlas.
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Del lado de los usuarios, también existen mil maneras de cuidar la huella ambiental de nuestros dispositivos. Primero, trata de evaluar cuando la tecnología aporta un valor real ¿ese cepillo de dientes conectado realmente aporta algo positivo a tu vida? La tecnología tiene casos de usos maravillosos, pero no hay que olvidar que puede también ser totalmente inútil en otros casos.
Luego, tenemos que contemplar nuevas prácticas responsables que implementar en nuestra vida diaria : tal como estás acostumbrado a apagar la luz cuando sales de un lugar ¿porqué no apagar los dispositivos cuando no los estas usando?
Aquí van unas ideas fáciles de implementar para cuidar el impacto de tu consumo digital :
- Extender la vida de nuestro equipo informático : la fabricación de hardware es una de las principales causas de la contaminación digital. Muchas asociaciones reparan tu equipo en lugar de tirarlo. Si es absolutamente necesario comprar equipo informático nuevo, puedes favorecer dispositivos recuperados y restaurados.
- Limitar el almacenamiento en línea : el almacenamiento de documentos en línea impone viajes de ida y vuelta entre el terminal del usuario y los servidores. Esto consume el doble de energía que almacenarlo directamente en la computadora. Si no tienes suficiente espacio en tu ordenador, puedes invertir en un disco duro externo.
- Favorecer el WiFi en lugar de la 4G : ¿Sabías que 4G usa 23 veces más energía que una conexión WiFi?
- Optimizar tus correos :
- No dudes en archivar y borrar tus correos electrónicos tan pronto como los recibas. Para el spam, puedes instalar un software que lo detecte y lo elimine automáticamente.
- Si tienes que responder a un correo electrónico, asegúrate de apuntar a quién tienes que enviarlo. Si no necesitas enviarlo colectivamente, evita la función de «responder a todos». Además puedes eliminar los anexos innecesarios y cree anexos ligeros si es necesario.
- ¿Necesitas enviar un archivo? Puedes usar una memoria USB o optar por servicios como Wetransfer, que sólo guarda los datos en el servidor durante unos días antes de borrarlos.
No te desanimes por todos los cambios que hay que hacer. Hazlo gradualmente y a tu propio ritmo. Cada acción que hagas ya será un paso para el planeta. ¡No dudes compartir tus propias ideas para reducir la contaminación digital que generamos!