RACC, líder en el ámbito de la movilidad en España, presentaron proyecto piloto mediante el cual los alumnos de una autoescuela tenían la oportunidad de sacar el carné o licencia de coche con la ayuda de unas gafas de realidad virtual.
La tecnología es asombrosa cuando intenta facilitar nuestra vida y eficientar procesos, esta vez la compañía RACC, facilita el proceso al cual nosotros le tenmos mucho miedo: aprender a conducir.
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Hace un año RACC presentaba un proyecto mediante el cual su división de RACC Autoescuela apostó por introducir la realidad virtual en las clases para aprender a conducir.
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Esta nueva manera de enseñar a conducir hace que consigan “conducir” por provincias a cientos de kilómetros y comprueban situaciones que jamás podrían analizar si no fuera por esta tecnología.
En las clases de momento se utiliza el celular del propio alumno junto con unas CardBoard, y para acceder a las lecciones lo único que tienen que hacer es descargar una aplicación en la tienda correspondiente (la app está disponible tanto en Android como en iOS). A partir de se momento, los alumnos se conectan con el profesor y la experiencia se vive “en directo”.
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