Consumir mejor, para vivir mejor.
Los altos costos económicos, ambientales y sociales del consumo nos obligan a replantearnos el sistema económico actual. Más que consumir menos, debemos consumir mejor. En México, son varios los emprendedores sociales que buscan promover un cambio en los hábitos de consumo para reducir no solo los impactos ambientales, sino también los sociales.
El consumo no solo debe ser responsable con el medio ambiente
Cuando hablamos de consumo sustentable se nos vienen a la mente muchas referencias como los alimentos orgánicos o los productos biodegradables. Incluso, entendemos el concepto como enviromental friendly.
Pero el consumo sustentable no solo se promueve para eliminar los efectos nocivos al medio ambiente. Para la Secretaría mexicana de Medio Ambiente, el consumo sustentable tiene un enfoque integral.
“el consumo sustentable abarca muchos otros aspectos, porque la sustentabilidad es un concepto integral que incluye al medio ambiente como preocupación fundamental, sin desvincularlo del resto de los desafíos sociales.”
Secretaría mexicana de Medio Ambiente
El consumo actual o como lo hemos conocido es un problema multifactorial con efectos sociales, ambientales y económicos. Así que, las soluciones deben implicar todas sus dimensiones para hacer más y mejor con menos y alcanzar el desarrollo sostenible.
Pero debemos tener cuidado, no hay que perder de vista que que millones de personas no tienen acceso ni siquiera a un consumo mínimo básico. Se trata de consumir de manera diferente, tomar decisiones basadas en la responsabilidad y ser conscientes de los impactos que tienen con la naturaleza y la sociedad.
Si hablamos de consumo, debemos hablar de producción…
La esencia del modelo actual es insostenible y también urge al sector privado a actuar. La contaminación ambiental y el bienestar social no deben ser solo temas para las organizaciones non profit. Podemos reinventar los negocios con un esquema de valor y de impacto. ¡Un negocio con impacto no significa un negocio menos exitoso!
El consumo responsable es una elección individual y pueden promoverse nuevos hábitos en la sociedad pero las políticas públicas y las decisiones empresariales también deben incentivar la sustentabilidad mediante la producción. Es necesario asumir el sistema de consumo como de producción.
Sabemos que el consumidor tiene la facultad de elegir pero ¿cómo elegir cuando no hay un gran alcance de productos sustentables? Ya hay emprendedores sociales en México que creen en la sustentabilidad:
Patched: Encontrarás calzado sostenible y accesorios hechos a partir del supraciclado de pantalones de post-consumo y residuos industriales de fábricas de mezclilla.
Arrezzz: Producen ecotelas y telas enceradas reutilizables para conservar los alimentos y sustituir el plástico.
Festival Nahual: Un espacio de venta que busca reeducar a la Sociedad Civil a un consumo responsable, local y de la mano de los productores.
ConSuma Conciencia: Sus productos son 100% naturales sin aditivos químicos y también generan beneficios al consumirlos.
El consumo y producción sustentables deben fomentar el uso eficiente de los recursos y la energía, la construcción de infraestructuras que no dañen el medio ambiente, la mejora del acceso a los servicios básicos y la creación de empleos ecológicos, justamente remunerados y con buenas condiciones laborales. Se trata de crear valor para todos con las actividades económicas, de vivir mejor.